Mi mejor Amigo

Sofi nació el 19 de septiembre del 2010, y el 23 de febrero del 2011 fue diagnosticada con Síndrome de West. Este, es un tipo de epilepsia, cuando Sofi tenía alrededor de 2 años, fuimos conscientes que además de su epilepsia, también tiene una comorbilidad: el autismo. 


Para poder ayudarle, intentamos de todo un poco: terapias físicas, neurológicas, mezclamos sistemas de comunicación y aprendizaje, y a partir de todos estos recursos hemos logrado -a largo plazo- que Sofi pueda habitar este mundo y nosotros conocer el suyo. Pero en la siguiente charla quiero platicarles cómo fue encontrar la mejor herramienta que tenemos ahora para hacer de su autismo, algo más llevadero, pero no sólo eso, sino que ese camino no sea tan solitario para ella. 


La idea de buscar "un mejor amigo para Sofi", la herramienta de la que quieto platicarles, surgió un día, cuando Sofi tenía 3 años. Ella no caminaba, con mucho trabajo se lograba sostener tomándose de los muebles,y  en ese entonces aún no hablaba, a la fecha no lo hace. Fue en ese entonces que mientras estábamos en el parque en compañía de mi hermano que él me dijo: lo que Sofi necesita es un perro para que aprenda a convivir. ¿Qué?... En ese momento mi respuesta fue un rotundo NO.


En casa nunca habíamos tenido mascota y cuidar a Sofi era ya muy complicado. No quería más responsabilidades, pues en ese momento las consideraba innecesarias. Para mí la solución era que Sofi necesitaba un hermano, y eso ya estaba en el plan. Y nada, que ahí quedó el plan de un perro, en una plática de parque, pero lo que no sabía es que Sofi no recibiría un hermano, sino dos. Hasta ahí, claramente nadie pensaba en la necesidad de un perro.

 

En 2017, después del sismo del 19 de septiembre, casualmente día del cumpleaños de Sofi, las noticias se empezaron a llenar con historias del perro de rescate Frida y su binomio. Y aunque no fue la única de su especie en las labores de rescate, si fue la más mediática. 


A mi me pareció una noticia muy inspiradora, pero era ajena a mi hasta que la popularidad adquirida por los “perros rescatistas”, me llevó hasta Alex el perro rescatista y su binomio, quienes estaban dando conferencias. Pero no fue así que la vida me puso frente a ellos, sino que un día me los topé frente a frente y en ese momento me enamoré de Alex, un labrador güero, nunca había sentido nada así. 


No recuerdo cómo sucedió, pero durante la plática me dijo que Alex había sido entrenado para dar apoyo a niños con autismo. Y en ese momento supe lo que teníamos que hacer por Sofi. Así que empecé a investigar cómo, dónde, y todo lo que se necesita para tener un perro Pero no necesitábamos un perro cualquiera ni uno de rescate, sino uno de asistencia.


La búsqueda fue difícil. No son datos que se encuentren en todos lados y la información que hay sobre los perros de asistencia es poca e incluso, juiciosa. Se piensa que pueden ser perros domésticos criados de "manera especial". Pero no es así. 


Al informarme, logré ponerme en contacto con una asociación, hicimos cita, tuvimos entrevista inicial, sin embargo, noté que dada la complejidad del caso de Sofi, ya que su epilepsia le ha causado una discapacidad motriz, no se animaban a darme un panorama a futuro. Me hablaban de terapias asistidas con animales, pero yo no quería mas terapias, yo quería al perro viviendo en mi casa con Sofi. Así, seguimos buscando y lo encontramos. 


Un lugar se animó a decir: sí, aquí entrenamos a un perro para Sofi. Pero en un mundo capitalista,  nada es gratis, eso incluye a los perros de asistencia. También hay que considerar que no es barato, ya que implica el trabajo de varias personas por un periodo prolongado de tiempo. El motivo del costo es sencillo, el entrenamiento tanto del perro como de Sofi, es de aproximadamente dos años. 

 

Ahí, volvió a aparecer la figura de mi hermano. Viajé a visitarlo porque acababa de nacer su primer hijo, y ahí en el hospital le recordé de nuestra plática en el parque, y le dije: "si Sofi va a tener un perro, no quiero que tenga cualquiera, quiero que tenga AL perro”. Y ahí le dije que un problema era el costo, y ahí mi hermano me dijo, “yo lo pago”. Luego, cuando le dije a cuánto ascendía el costo (en ese entonces no lo sabía con certeza), dijo: yo te ayudo con una gran parte, ya vemos de donde sale el resto.

 

Cuando encontré el lugar, se tuvieron varias llamadas telefónicas, principalmente para recabar datos. Finalmente se tuvo una valoración inicial, en donde la persona encargada de la asociación evaluó a Sofi, y le hizo pruebas con varios perros de terapia, ahí fue cuando nos explicó el proceso y los costos: hay dos tipos de entrenamiento, uno de servicio, y otro de apoyo emocional, la diferencia entre uno y el otro es que el perro de servicio está entrenado para apoyar a su usuario en todo momento y en todo lugar, incluidos lugares públicos, mientras que el perro de apoyo emocional solo tiene entrenamiento para estar en casa. 


Ahí sabíamos que si íbamos a lanzarnos a la aventura de tener un perro queríamos el “paquete completo”. Por lo que definitivamente dijimos que queríamos el perro de servicio. 

 

Se nos explicó que el costo cubre el costo del perro, su entrenamiento y las terapias para Sofi y el perro. Era 2018, y no recuerdo bien la cifra exacta pero eran aprox 250, 000 pesos. También nos dijeron que de todos los perros que había entregado solo uno fue pagado en ese momento y que los demás se pagaron con campañas de recaudación de fondos, nosotros definitivamente necesitábamos una campaña de esas, porque el apoyo de mi hermano no lo cubriría todo. Y es que si bien, parecía ser la solución perfecta y aún ahora lo es, el acceso a ella lamentablemente no es para todxs.

 

Una vez definido eso, se nos dijo que el proceso consistía en que ella, con ayuda de un criadero, eligirían la personalidad del perro. De acuerdo a las necesidades de Sofi, ella necesitaba de un perro tranquilo, dado la poca movilidad de ella. También debía ser un perro poco sensible, porque ella muerde, jala el pelo y hasta llega a patear. Tenía que ser negro, porque Sofi no le hizo caso a perros de otro color, nos dijeron que la raza ideal era labrador retriever. 


La elección del cachorro se hace cuando este tiene 1 año de edad, y a ese proceso se le conoce como “año de sociabilización”. A partir de ahí, criadero y entrenadores se dan cuenta si un perro tiene el carácter para ser perro de servicio, porque no todos los perros tienen la personalidad. 

 

Así, pues, en Octubre del 2018, nos hablaron para decirnos que ya tenemos al perro. ¿Cómo quieren que se llame?... La primera opción fue Sócrates, porque cuando yo estaba embarazada de Sofi, y estábamos definiendo el nombre del bebe, un día en el desayuno se volteó el papá de Sofi, y me dijo “se va a llamar Sofía porque me gusta la Filosofía, y vamos a tener un perro y se va a llamar Sócrates”. Desafortunadamente no nos aceptaron el nombre, nos indicaron  que tenía que ser un nombre corto, preferentemente de una sílaba, ya que no podíamos desechar la idea de que Sofi pudiera hablar, y tenía que ser algo fácil de pronunciar. Por otro lado, tenía que ser fácil de identificar por Sofi. 

 

Así que después de mucho pensar, de pedir opiniones, el papá de Sofi propuso Timón. La primera razón, porque sería el timón del barco, pensando en que Sofi es el barco. Y por otro lado, yo soy fan de Disney, y acabábamos de ver El Rey León, y ese día tuvimos oportunidad de estar “back stage” y el personaje con el que Sofi logró contacto visual fue con Timón. El nombre de Timón fue aprobado por la entrenadora, y así bautizamos a lo ahora conocemos como el mejor amigo de Sofi. 

 

A la par, inició la campaña de recaudación de fondos que se hizo a través de la plataforma: Donadora. Un gran amigo mío, diseñador y maestro de comunicación, se propuso como líder de proyecto, realizó el tema de campaña, ayudó a conseguir recursos humanos para la grabación del video, desarrolló el video, en fin todo. Mas sin embargo, no lo hizo solo. Otro gran amigo, dramaturgo y activista, nos ayudó a que Yolanda Ventura, miembro del grupo español Parchis, nos ayudara con darle voz a la campaña: ella era la voz, pidiendo apoyo para poder “encontrar al mejor amigo de Sofi”, como decidimos nombrar la campaña: “Buscando a mi mejor amigo”. 

 

Mis amigos, el diseñador, y el dramaturgo, no fueron los únicos  mucha gente ayudó, desde el diseño y apoyo para la campaña, otrxs en compartir y difundir, y muchxs más en donar desde 1 peso, y así se logró el objetivo. En enero del 2019 se tenía el dinero para pagar el entrenamiento de Timón. 

 

Pero ese mismo  2019 fue un año difícil, realmente el lugar de las terapias nos quedaba muy pero muy lejos, había que llevar a Sofi una vez a la semana. En un inicio como Timón era todavía cachorro, los primeros meses Sofi trabajó con perros de terapia, y fue hacia abril del 2019 que Timón y Sofi por fin se conocieron. Y así, iniciaron las terapias con “su mejor amigo”.

 

Ya se acercaba la fecha en que Timón iba a vivir con Sofi, sin embargo llegó un suceso inesperado, la pandemia de Covid-19, y todo se detuvo, no más terapias, no más entrenamientos, todos encerrados, en cuarentena, al ver que la pandemia no iba a acabar pronto y que obviamente Sofi no estaba nada bien debido al encierro, es que tuvimos que pensar en seguir el entrenamiento “a distancia”; así que junio y julio del 2020, yo le daba la terapia, los peluches simulaban a Timón, la entregadora veía los avances, no era lo ideal, pero era la única manera. Ya casi estaba todo listo, faltaba un entrenamiento intensivo para mí y el papá de Sofi, durante una semana fuimos a capacitación, necesitábamos saber cómo tratar a Timón. Timón un par de veces fue a la casa a conocer, se lograron tener algunas sesiones. 

 

Cada vez faltaba menos, y así fue como el 22 de agosto del 2020, fuimos el papa de Sofi y yo, a la última capacitación, y al terminar Timón se subió al coche para dirigirse a su nuevo hogar.  A Timón se le entrenó para ser compañía de Sofi en todo momento, para ayudarle a disminuir sus desregulaciones, a bajar su ansiedad y a ayudarla a esperar.

 

Las primeras semanas de Timón en casa fueron de adaptación, él tuvo que aprender donde ir al baño, aunque estaba perfectamente entrenado tuvo algunos accidentes, tenía que saber en qué momento estar con Sofi y cuando podía descansar de sus responsabilidades, tenía que saber cómo comportarse a la hora de dormir a Sofi y lo mas importante, durante todo el tiempo de terapias con Sofi nunca la vio en crisis. 

 

En una ocasión Timón se acercó a Sofi, y en ese momento Timón se hizo del baño, estaba yo muy enojada, no se suponía que no deberían pasar esas cosas, pero no tuve tiempo de enojarme más porque en ese momento Sofi entró en crisis, ya no era importante lo que había hecho Timón, ya casi acabábamos de limpiar cuando Sofi entró en crisis, era una desregulación, después de varios minutos logramos calmarla, al analizar la situación el que Timón se haya hecho del baño fue su forma de avisar, que Sofi iba a tener una crisis. Él no sabía cómo comportarse, no sabía cómo avisar,  se habló con la entrenadora, nos dijo cómo, y desde entonces Timón sabe cuándo Sofi va a tener una desregulación, y nos avisa, pero no haciendo del baño junto a ella… 

 

Desde Agosto del 2020, el sueño de Sofi, mejoró de manera significativa, todas las noches él duerme con ella, en su cama. Cada vez que Sofi va en el coche él la acompaña, y ella por lo regular va mucho mas tranquila, en casa ella encuentra una actividad muy divertida en darle de comer. 

 

Cuando se levantaron las restricciones de la pandemia y pudimos salir a actividades recreativas, empezamos por ir a restaurantes, y ahí Timón la ayuda en no desesperarse en lo que llega la comida, algunas veces le da de comer, o con que simplemente este junto a ella, Sofi esta tranquila. 

 

Después nos animamos, a ir al cine, Timón todo el tiempo junto a ella, he de decir, que Timón es muy pero muy tragón y yo juraba que se aventaba a dulcería, pero no, guardo la compostura, se quedó junto a Sofi todo el tiempo, y toda la película estuvo como “taburete”, a los pies de Sofi… solo sacaba la lengua como serpiente para tratar de alcanzar alguna palomita que se caía. 

 

La siguiente aventura fue llevarlo de viaje, fuimos a Acapulco, a un departamento, es importante decir eso, porque no es lo mismo llevarlo a una casa que a un hotel, cosa que hicimos en semana santa del 2022. En Acapulco Timón, rompió con todas las leyes de los perros, nos dijeron que iba a dejar de comer, y que le iba a gustar nadar, pues no dejó de comer, y no le encanta el agua, solo se acerca al mar, cuando Sofi esta en la orilla, y “pues es parte de su trabajo”. 

 

De nuestras últimas aventuras fue cuando acompañó a Sofi en un viaje en avión, la tranquilidad que él le transmitió a Sofi durante el vuelo no tiene precio. 

 

En septiembre del 2023, le toco a Sofi, su limpieza de dientes, Timón fue pieza clave para el éxito, él literalmente estaba arriba de ella, para darle contención en lo que la Dra. La detenía para hacer la limpieza. Todo el periodo de vinculo y adaptación en casa se tuvo el apoyo de la entrenadora, de Timón, cuando empezaron las salidas post-pandemia ella nos guío para saber que hacer, en el restorán, cine, vacaciones, hotel, avión, y hasta en Six Flags. 

 

No todo ha sido felicidad, por desgracia México nos falta mucha cultura alrededor de los perros de servicio pues se asumen como mascotas y no como parte del servicio de una personas con limitantes. De hecho, por esa razón, en algunas ocasiones nos ha costado un poco de trabajo que nos den acceso a algunos lugares, y por desgracia, el 5 de noviembre del 2022, nos corrieron de una plaza comercial, nos decían que el perro no podía estar en las instalaciones, aún cuando se les comprobó, que llevábamos a Timón uniformado, con correa, que estaba acompañando a Sofi, y además llevaba sus papeles en orden. Afortunadamente hemos podido incidir y emitir recomendaciones. Pero, repito, no es la realidad de todos. Por eso es importante visibilizar la necesidad y gran ayuda que son los perros de asistencia, así como lo problemático que resulta la limitación de su acceso. Estos, son los mejores amigos de muchas personas con discapacidad, ansiedad y autismo, y tenerlos y poder acceder a ellos es u n derecho humano que no puede seguir siendo negado. 

 

Timón se convirtió en un miembro más de la familia, le cambió la vida a Sofi, definitivamente ella está mucho más tranquila cuando esta con el, y duerme mucho  mejor con él, lo sabemos porque claramente como cualquier ser vivo Timón se ha enfermado y en lo que se recupera no duerme con Sofi, y esas noches que Timón no está ella se despierta varias veces en la noche. 

 

Como lo dijo mi amigo cuando diseño la campaña, buscamos, encontramos y definitivamente vivimos con el mejor amigo de Sofi…

 


 

 

 

 

 

 

 


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